• • • Según la OMS, para el año 2030, las patologías por salud mental van a ocupar el primer lugar en la carga global de enfermedades. 
  • En la última década las patologías mentales de origen laboral han aumentado en más de un 600% en Chile. Una de cada cinco licencias médicas tiene por diagnóstico algún tipo de trastorno mental, las que equivalen anualmente a 50 mil días perdidos.
  • El deterioro emocional del personal de la salud y de la población sometida a cuarentena son parte de las consecuencias que arrastra la pandemia a nivel mundial. En Chile, que ya experimentaba un importante deterioro en salud mental debido a los altos niveles de estrés que reportan los Chilenos, las  as licencias electrónicas autorizadas por coronavirus llegaron a 34.623 entre enero y abril del 2020, mientras que la primera solicitud de este tipo se generó en febrero pasado. En tanto, los documentos otorgados por problemas psiquiátricos subieron en un 29%, según reporte de Superintendencia de Seguridad Social de Chile.

Encuestas revelan que los principales síntomas que los chilenos asocian al trabajo son síntomas vinculados al estrés: sensación continúa de cansancio,  dolores de cabeza, problemas para dormir y sentirse tenso o irritable. 38% de las mujeres y 25% de los hombres refieren sensación continua de cansancio. Son cifras alarmantes considerando los perjuicios que generan en términos de calidad de vida personal y laboral, así como económicos y de productividad.

Es así como los líderes que sean capaces de identificar cómo el estrés afecta la salud en general, la productividad y la moral de una organización generarán una gran diferencia. Abordar las causas del estrés en los individuos y en las organizaciones conduce a un mayor rendimiento, un menor número de días perdidos y, sobre todo, refuerza el hecho de que la empresa realmente se preocupa por sus empleados.

El estrés y la ansiedad se encuentran debajo de la superficie, algo que los colaboradores aprenden a manejar hasta que deciden escapar renunciando a su trabajo o afectando negativamente su nivel de compromiso. Se gestan silenciosamente, tiñendo negativamente al ambiente emocional, llegando incluso a paralizar a equipos.

Comenzar a diagnosticar el estrés y empezar a crear un lugar de trabajo más saludable y productivo es ya una preocupación de muchas organizaciones, sin embargo, las empresas rara vez entienden cómo identificarlo. El manejo del estrés también requiere de un alto nivel de autoconsciencia, y probablemente, las personas recibimos varias señales cuando los límites se escapan de la tensión o desafío laboral  motivador. Comenzamos a tener alteraciones en el sueño, malestares musculares, irritabilidad, cansancio, sin embargo, como estas dimensiones no han estado históricamente validadas en nuestra sociedad, no atendemos estas señales y le bajamos el perfil a las consecuencias que esto trae.

¿Qué pasaría si usted tuviera la capacidad de detectar el estrés antes de que este se salga de control?

WRIGHT, como asociado certificado de TTI Success Insights en Chile, ha incorporado a sus soluciones de medición y desarrollo de personas el Coeficiente de Estrés, que permite detectar las fuentes y niveles de estrés de una persona o equipo, para el diseño oportuno de estrategias para su prevención y manejo.

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